En México existe poca oferta de carreras aeroespaciales y, mayoritariamente, se enfocan en la manufactura, por lo que armar un laboratorio para hacer desarrollo espacial se hace desde cero y, por lo tanto, resulta muy costoso. Es aquí donde las universidades, como la Panamericana, deben ser capaces de proporcionar espacio de trabajo y facilidades de interacción con otras instituciones.
La colaboración entre asociaciones permite que los posibles desarrollos espaciales lleven mucho menos tiempo del esperado; ya que facilita visualizar el avance realizado por otras instituciones y mitigar riesgos mediante las experiencias obtenidas en los procesos individuales. Es debido a lo anterior que la principal necesidad para realizar tecnología espacial es la cooperación mutua.
Recientemente las universidades mexicanas han optado por realizar investigación y desarrollo tecnológico de tipo espacial. Todo esto acompañado por estudiantes entusiastas por dar pasos en la nueva era espacial mexicana. Se puede notar que estos avances han sido realizados con gran esfuerzo y logran recaudar fondos y hacer convenios entre instituciones de varios giros.
Universidades para Aztechsat
Alrededor del mundo, la industria aeroespacial ha tenido un rol muy importante en el progreso de nuevas tecnologías, la constelación AztechSat, un proyecto desarrollado por mentes mexicanas, busca impulsar el progreso aeroespacial en nuestro país, mediante la perfección de una constelación de nanosatélites con fines de investigación, el primer proyecto de su clase en nuestro país.
AztechSat es una obra surgida de Misión Colibrí, en el cual participan las tres sedes de la Universidad Panamericana. Las aportaciones que puede realizar este proyecto —además del rastreo de mamíferos marinos— es el desarrollo tecnológico, la generación del conocimiento y la consolidación de colaboración entre instituciones mexicanas para el desarrollo nacional.
Estos grandes avances han sido objeto de elogios por la comunidad científica y además han demostrado que el sistema educativo en México ya sea privado o público es significativo para empresas y universidades extranjeras en una colaboración en conjunto.
Comenta el Dr. Héctor Eduardo Gilardi Velázquez, profesor de la Facultad de Ingeniería: “estamos convencidos que este proyecto será la primera edición de muchas colaboraciones posteriores en donde se espera tener un crecimiento nacional con la participación de diferentes instituciones y dependencias que centran su interés en el desarrollo de tecnologías espaciales.”
Futuro e importancia de la industria espacial en México
En la actualidad se han creado empresas a nivel industrial donde se fabrican y ensamblan diversos componentes como suministro para Estados Unidos. Este hecho remarca cuán importante es empezar a fomentar una verdadera industria aeroespacial mexicana con identidad propia para dejar de ser proveedores y convertirnos en desarrolladores de misiones espaciales.
“La creciente inversión extranjera en la industria aeroespacial en México (3285 millones de dólares de 2007 a 2016) nos indica que estamos en el momento idóneo para empezar a invertir en nuestra propia tecnología. Hemos dejado atrás la etapa crítica de nula participación y hemos avanzado a ser posibles desarrolladores de tecnología. Aún falta mucho por hacer, pero con la colaboración adecuada de los sectores público y privado pronto podremos llegar a tener en el país un verdadero programa espacial”, concluye Héctor.