“Disfruté especialmente el curso, pues desde siempre me han gustado mucho los temas tratados y he leído y estudiado mucho al respecto, sobre todo en materia filosófica. Profesionalmente, me ayudó a complementar mi visión de los asuntos (soy abogado) y como consecuencia de ello, a ampliar y dar mayor sustento a mi criterio jurídico. Además, me llevó a conocer a los profesores que integran el claustro académico, quienes además de ser brillantes como catedráticos, son también grandes y talentosas personas”.

“El posgrado me ha permitido disponer de una perspectiva más amplia y una comprensión general, aunque muy precisa, respecto al pensamiento de grandes filósofos a través de la historia, lo que permiten analizar, aventurarse y revitalizar las grandes preguntas del ser, mismas que hasta nuestros días se mantienen vigentes. Esto como académico es de gran importancia, dado que en un mundo donde abunda el acceso a la tecnología genera una influencia que sin la guía correcta puede confundir a nuestros estudiantes, por lo que esta especialidad además de conocimientos, renueva los modelos de pensamiento que hacen más vigoroso el ejercicio intelectual”.

“La Especialidad en Antropología me ha dado argumentos sólidos para sustentar la enseñanza de las asignaturas que imparto de una manera más completa. Me ha dado la oportunidad de socializar el conocimiento con expertos de otros campos del saber, los cuales han enriquecido el diálogo académico en torno a los temas tratados en la Especialidad. Por último, ha reforzado mi visión cristiana de la vida y la ha resignificado”.

“En cuanto a competencia metodológicas, análisis y pensamiento crítico, profundizar y concientizar sobre la dignidad humana y todas sus implicaciones. Valorar más plenamente la vida y cada instante, poder compartir con otros estas reflexiones e inspiraciones”.

“La Especialidad en Antropología Filosófica nos brindó herramientas clave que nos ayudarán a navegar en la vida. Contamos ahora con argumentos de peso para defender la dignidad humana, tenemos mejor capacidad para reflexionar sobre nuestra era y manejarnos en conflictos morales, y tenemos más claridad de que no todo es una ecuación, hay matices. Podemos y debemos construir visiones críticas de la realidad”. 

“Estudiar la Especialidad en Antropología Filosófica no sólo me permitió desarrollar nuevos conocimientos sobre la esencia de la persona humana y la ética, sino que logró incidir sobre mi persona, siendo medio idóneo para favorecer la formación de mi raciocinio, conciencia y libertad.”

“La especialidad me dio la oportunidad de conocer a profundidad los fundamentos teóricos de la antropología y la ética con un enfoque eminentemente humanista, lo cual me ha permitido tener las herramientas y argumentos históricos y actuales para poder ser cada vez mejor profesor y profesionista. Me abrió nuevas ventanas al conocimiento, que han contribuido a poder realizar una introspectiva sobre nuestra condición humana y una permanente reflexión sobre la trascendencia del hombre.”

“Con la Especialidad en Antropología Filosófica logré tener un mayor entendimiento del ser humano en todas sus dimensiones incluyendo lo espiritual, para mí como persona formada en la ciencia  me ha ayudado a conectarme mejor tanto con mis alumnos como con mis compañeros de trabajo.”

“Cursar la Especialidad en Antropología Filosófica en la Universidad Panamericana me proporcionó las habilidades necesarias para reflexionar, comprender y analizar el papel del hombre y la mujer en la sociedad actual con una visión transformativa hacia el ámbito educativo.”

“Al estudiar la especialidad en Antropología Filosófica en la Universidad Panamericana he adquirido un mayor conocimiento de mis orígenes como ser humano, y al mismo tiempo he obtenido madurez en cuanto a mi pensamiento y mi forma de ver el mundo, al apreciar lo que hay a mi alrededor y tener un criterio más acertado de las situaciones que se me presentan en mi vida diaria.”

“Haber tenido la oportunidad de estudiar la Especialidad en Antropología en la Universidad Panamericana, me ayudó no solo a entender a la persona de forma integral y en todos sus contextos, también, a poder desarrollar mayor sensibilidad a sus necesidades y poderlas conjugar con la toma de decisiones asertivas que se fundamenten en principios éticos, de valores y justicia.”